martes, 9 de octubre de 2007

MÁS NIÑEZ


Dejemos quietos a la familia Restrepo López y sigamos con la propia.
Teníamos en ese entonces una finquita como decimos los paisas ubicada en donde hoy en día esta situada la casa del Dr: Ardila Lule, transversal superior ,con los Balsos.
Nos íbamos los fines de semana en un automóvil Rambler ,verde dos tonos, el cual antes de llegar , al subir por los Balsos, se recalentaba y el viaje se volvía de una hora aproximadamente ,tratando de alimentar el sediento radiador. Al llegar salían todas las ansias reprimidas de una semana de estudio y látigo. La mangas, árboles y quebradas quedaban chiquitos para la energía desfogada que surgía. Se llamaba Cerro Verde y tenia una hermosa vista del occidente de el Medellín de ese entonces.
Fue época de muerte de varios personajes que hicieron historia ,como el Papa Juan veintitrés y John F Kennedy. Hacia pocos días mi padre les había traído a mis hermanas, de Panamá un mercedes convertible ( A escala ) par la Barbis ,era espectacular .Procedí sin pensarlo a montar a Kent, el amante de momento de la Barbi, y a la Barbi , en dicho vehículo ,para pasar como un gran productor de cine a representar el asesinato de Kennedy .Los sitúe en el parqueadero de la finca y procedí, con un rifle de balines a masacrar a los ocupantes y al vehículo. Volaron añicos por todos los lados, las ropas de los ocupantes quedaron fogueadas y ni hablemos del Mercedes. Ese mismo día volaron mis pedazos de cuero al aire al ser abatido por la correa de mi padre.
Los globos eran otro de los juegos Decenbrinos que teníamos, salíamos en compañía de mis primos ,Echavarria ,Escobar ,acompañados de una jauría de perros y chinches , a perseguir dichos globos por todas las mangas de los Balsos. Las caucheras eran nuestras armas de defensa personal y la mejor era la que mas cauchos tuviera. Olía el aire a pólvora sana, a petróleo para los globos, a natilla y a marranada. Pasábamos uno de esos días por el convento que aun hoy en día esta ,a comprar hostias o recortes que era lo que vendían las monjitas. Tocamos varias veces y no habrían la puerta ,procedimos a dar la vuelta por la puerta de atrás ,cual no seria la sorpresa cuando vimos a las monjitas en vestidos de baño al lado de la piscina. Una de ella al vernos ,grito furibunda, muchachas para adentro y ustedes jovencitos quedan excomulgados. Aun no he podido saber si quede excomulgado o no.

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