jueves, 24 de enero de 2008

CERRO VERDE Y LOS ARRAYANES

Ambos Nombres ligados a la naturaleza y al verde ,eran nuestras fincas , digo nuestras pues eran de dos hermanos, mi padre Ernesto y mi tío Rafael. En esa época estaban donde hoy en día hay cantidad de edificios, para ser mas exactos trasversal superior con los balsos.Eran prácticamente pegadas la una de la otra ,lo mismo que la gente, solo nos separaba una hilera de bambú. Heredadas de mi abuelo Rafael Echavarría eran el refugio nuestro los fines de semana y vacaciones, eran algo parecido al desahogue, pues llegábamos y automáticamente desaparecían nuestras tristezas para ser internadas en la yerba y los arboles que las rodeaban. Estaban como digo, rodeadas de todo tipo de vegetación ,ya difícil de ver hoy en día como eran los pomos, madroños, moras de castilla y una cantidad de matas raras .Las quebradas para apostar carreras de barquitos y pescar capitanes sobraban ,habían también un sin numero de perros pastores alemanes y colis los cuales nos acompañaban en nuestras múltiples cacerías de globos y pájaros, también disponíamos de un convento que creo haber mencionado en otro capitulo, donde nos vendían ostias y además nos excomulgaban. Nuestras únicas armas eran las caucheras o hondas de palos de guayabo talladas con navajas y pulidas al máximo, el final de las caucheras era una marquilla de los bluyines el roble que atravesaban varios cauchos que eran los que le daban fuerza a esta. También teníamos varios tipos de juguetes como trompos y yoyos marca Canuto los cuales elaboraban en nuestra presencia en Medellín.
Los vehículos de moda eran un Rambler y un Plymout ,acompañados por dos lambretas destartaladas que no nos dejaban oler a los pequeños y un Henry J gris de Rafael hijo.Había también una gran variedad de ciclas Monark (Todas sin frenos) que eran las únicas en que podíamos montar los pequeños, siendo humillados por las lambretas .No teníamos PC ,nintendos ni ningún tipo de juego, todo era inventado por nosotros ,hasta el horario que no tenia restricciones de ningún tipo, solamente cuando estábamos mamados entrábamos a tomar algo de limonada o algún jugo. Teatro privado también teníamos en la finca vecina del Dr. Henao Posada donde proyectaban cada ocho dias películas del gordo y el flaco en blanco y negro. Habia tambien olimpiadas, llamadas los múltiples que eran competencias con los vecinos de las fincas del sector donde se veía todo tipo de contiendas deportivas.
No había prohibiciones, las casas eran de todos y todos podíamos entrar y salir libremente de ambas ,no sabias donde ibas a almorzar o a comer, pues en ambas casas había todo tipo de manjares y asados, podías probar aquí y allá. Pero lo bueno no dura mucho y la ciudad creció y la nueva vía nuestra finca destruyo llevándose así uno de lo periodos mas bonitos de nuestra infancia.

jueves, 17 de enero de 2008

BELLA VISTA

Paso a narrar los hechos tal y como fueron ,en una de las etapas mas importantes en mi vida, sin ocultar nada. Corrían los años ochentas muy al principio y el narcotráfico y los narcos se movían como pez en el agua ,sin que nadie comentara nada. Entre ellos estaba yo, no como narco sino como servidor, en ese entonces trabajaba en una concesionaria Chevrolet en Medellín. Eran épocas de vacas gordas y el dinero se movía ágilmente y a gran escala. Vendía vehículos y todos los secuaces de Pablo y sus amigos iban y venían comprando carros últimos modelos y taxis. El monito me decían varios de ellos ,las propinas sin mentir en aquella época eran de doscientos mil o trescientos mil por agilizar las diligencias o tramites de matriculas y cupos de dichos vehículos. Se podrán imaginar un muchacho de mi edad con sueldo de mas o menos de tres millones en esa época. Caballo desbocado no lo para pasa rienda. Paseos, rumbas, carros y toda suerte de festines y atenciones. No me dolía nada ni creía en nadie, era pues el señor poder, amo indiscutible de todo lo que quisiera. Cierto día llego un ex compañero del colegio y me pidió el favor de que le ayudara a conseguir un camioneta Toyota cero kilómetros ,indagué a ver quien la tenia y lo remití a la agencia donde las vendían. En resumidas cuentas se dio el negocio y compro dicha camioneta. Cual no seria mi sorpresa cuando a los seis meses le quitan la camioneta por falsedad de papeles y dice muy orondo, el carro me lo vendió Juan Diego Echavarría. Al otro llegaron por mi cinco señores del F2, armados hasta los dientes y quede detenido. Derecho para los calabozos de Buenos Aires sin decir ni mu, yo un niño acostumbrado a tener todo y no creer en nadie, detenido y rodeado por lo menos por cincuenta malandrines. Quede mudo del susto y del miedo, pensando en mi madre y en sus principios morales y religiosos. Me dieron una llamada y llame a mi hermano mayor José Luis contándole lo injusto y equivocado de mi detención, a lo cual me replico, ándate tranquilo que yo arreglo la cosa. Que tranquilidad podía tener yo en ese momento, siendo carne de cañón fresca para bella Vista, en fin ,me llene de valor y aborde el furgón con la remisión para Bella Vista. Se podrán imaginar la ropa y la presencia mía en medio de un furgón lleno de presos lo que iba a provocar. Pues efectivamente fui despojado de todo ,menos de mi virginidad guardada con tanto ahincó. Llegamos a las seis de la tarde a la finca como le llaman, mamado, asfixiado y vuelto un física mierda. De allí hasta el otro día amanecimos en un calabozo colectivo ,entre unos ochenta reos tirados en el frio suelo. Quien duerme? Ni el putas. El único ratico que cerré el ojo tuve un sueño que creo que fue el respaldo para mi estadía en la finca. Un crucifijo en forma de balanza con la justicia en el medio.
Amanece ,tocan la diana a las cuatro de la mañana y suena un sarcástico himno a la libertad, luego nos empiezan a llamar y asignar los patios, me asignan el quinto y me consuelo con lo de que no hay quinto malo. Entro a ser parte de cuatrocientos presos en el quinto patio de Bella Vista de un día para otro y sin ningún tipo de instrucciones o normas de comportamiento. Me siento el ser mas degradado y despreciable del mundo, sin tener culpa alguna a lo que a mi se me acusa. En fin estando sentado escasamente con un pantalón, sin camisa ni zapatos, se me arrima el ser mas miedoso que he visto, quien se presenta como el gurre y me pregunta , que le pasa pichón de rico? A lo cual le conté mi trágica aventura .Usted tiene cara de contrabandista pero de repollos fue lo que me contesto y me invito a subir al tercer piso del patio. Cada patio tiene tres pisos y los presos son los dueños de cada piso y sus camas de cemento, eso si, si entras sin plata ,estas fregado o a dormir en el piso, pues todo tiene dueños y amos. Si no conoces a nadie te fregaste ,o pelas el billete para que te cuiden, te alimenten y puedas dormir en una cama de cemento. Bueno, me subí pues con el gurre al tercer piso y me presento sus ñeros ,ya me imaginaba durmiendo en piso frio, sin nada encima ,cuando el gurre dijo, muchachos este niño no parece malo vamos a darle una cama y efectivamente, me asignaron una cama blanda de cemento en la cual pude dormir entre comillas. Al otro día como de costumbre sonó la diana a las cuatro ,todos al primer piso y lista en mano nos llamaron a todos para luego pasar a las duchas colectivas para bañarse sin ningún tipo de recato al frente de doscientas personas ,tal como nos trajo mi Dios al mundo .Luego a pasar al bongo o restaurante , que varios perros en Medellín comen mejor que allí ,por lo cual se tiene el dicho ,que mas malo que la comida de Bella Vista. Como a las diez ,hubo consejo de los ñeros y me llamaron a interrogatorio ,preguntándome que sabia hacer , a lo cual respondí, se cocinar. Fue la palabra mágica , pues mucha gente ante lo malo de la comida tiene sus propios caspetes o restaurantes internos para vender comida pasable a los internos de modo. Desde ese momento en adelante me volví el personaje de moda pues hacia toda suerte de comidas y las vendíamos a todos los tres pisos ,hacían fila para probar mis frijoles y chicharrones, sancocho, lentejas ,bandeja paisa y muchos otros mas. Desde ese día en adelante me convertí en el niño mimado del gurre y sus secuaces y mi cama era respetada y exclusiva para mi ,sin costo alguno. Si tienes plata en la finca puedes manejar lo que quieras y conseguir lo que desees , desde licor, alimentos, droga en fin es un mercado persa. El domingo es el día de las visitas y si ya pasaste interrogatorio en juzgado, tienes derecho a que te hagan visita. Ese Domingo estaba yo en el primer piso relajado tomando el sol cuando suena el alto parlante replicando mi nombre, cual no seria ni susto pues yo no tenia derecho a visita y pensé para mis adentros, si es alguien de mi familia no soy capas de dar la cara. Salí con mucho disimulo mirando de reojo y vi una señora para mi desconocida la cual me llamo por mi nombre. Mas asustado que curioso salí donde ella y resulto que era la ayuda que me mandaba mi hermano , esposa de un famoso contrabandista abatido años antes, se había dedicado a dar consuelo a los presos sin causa y apoyo y se movía con tranquilidad por muchas cárceles del país. Me saco del patio y me llevo al segundo patio, cuyo regente en esa época era el famoso Mono Trejos, ladrón de bancos muy mentado , quien me brindo su apoyo y colaboración, es mas me ofreció alojamiento allí ,el cual rechace pues ya estaba amoldado a mis ñeros .
Desde ese día en adelante no me falto nada ,ni dinero, ni vigilancia ,ni apoyo pues el Mono había quedado muy encargado por dicha señora de no desampárame en ningún momento.
Baje dos veces a interrogatorio y afortunadamente se dieron cuenta de mi inocencia muy rápidamente. Al sábado siguiente ajustaba diez días ,estaba como siempre sentado tomando sol y me llamaron por alto parlante, corrí muy extrañado pues los sábados no hay visita ,era mi boleta de libertad , mi salida de la cárcel, era dejar mis nuevos compañeros era volver a la realidad, era decirles los dejo, los abandono. Para eses entonces tenia de todo ,camas, ropa, caspete y era un fuerte en el tercer piso. Subí lentamente al tercer piso con mi boleta de libertad entre la manos y un lagrima en los ojos paras darles a mis ñeros la fatídica noticia que ya mas no estaría con ellos. Ese día vi llorar tres ampones , me quite todo lo mío ,se los entregue y salí tal como entre, sin nada pero con una experiencia muy grande a mis espaldas de la cual he sacado muchas lecciones para vivir y entender esta efímera y pasajera vida. Gracias.